En un hogar hay pocas cosas tan tediosas y pesadas de limpiar como el horno. Puesto que nosotros lo usamos a menudo y a fondo, se acumula fácilmente suciedad y capas. Pero ahora he encontrado este método para limpiar el horno tan fácil y rápidamente que casi parece que se limpia solo.
Pero, con esta artimaña no hace falta usar productos químicos ni detergentes.
Lo hacemos en dos pasos: Primero la limpieza del horno en sí y después la ventana de cristal.
Se necesita esto:
- Agua
- Una botella rociadora
- Levadura en polvo
- Un trapo o una esponja para vajillas
- Vinagre
- Un cuenco pequeño
Procedimiento:
El horno:
1. Quite la parrilla y los soportes del interior del horno.
2. Prepare el cuenco. Mezcle unas cucharadas de levadura con un poco de agua. La finalidad es conseguir una pasta o masa que se pueda esparcir fácilmente en las superficies que se van a limpiar.
3. Esparza la pasta en todo el interior del horno. La levadura se volverá marrón cuando se esparce. Lo más importante no es conseguir una capa regular, sino cubrir todas las superficies.
4. Deje que la pasta haga efecto durante la noche. Son necesarias como mínimo 12 horas para que la levadura haga un buen efecto.
5. El día siguiente: Con un trapo húmedo, limpie tanta levadura como sea posible.
6. Vierta un poco de vinagre en la botella rociadora y rocíe en todos los sitios en que quedan restos de levadura. Cuando el vinagre reacciona con la levadura, se forma una espuma.
7. Seque con un trapo húmedo.
8. Introduzca la parrilla y los soportes.
9. Encienda el horno a una temperatura baja durante 15-20 minutos para secarlo.
La ventana:
1. Mezcle levadura en polvo con agua para formar una pasta espesa (o masa).
2. Aplique la pasta en el cristal.
3. Deje que la pasta haga efecto durante aproximadamente media hora.
4. Use un trapo o esponja lavavajillas para eliminar fácilmente la suciedad.