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Forma correcta de limpiar los oídos

El oído es un órgano sensorial que permite percibir los sonidos, formando el sentido de la audición​ y muchas de las personas suelen tener problemas con ella.

Y es algo curioso porque uno pensaría que al tratarse de una actividad tan simple no debería de haber tanto problema. Sin lugar a dudas, ahora que pensamos que el uso de los hisopos debería de ser un limpiador por completo es que nos enfrentamos a la noticia de que no necesariamente tienen que serlo.

Lo que pasa es que para el mejor cuidado de la salud y de la higiene, el hisopo no precisamente debería ser insertado en el oído, ya que podría llegar a dañar algunas partes internas del oído y eso sería bastante complicado y hasta doloroso. Además, ahora se sabe que la misma cera que se crea en los oídos no es tan mala como en algún momento nos llegaron a decir.

La cera es benéfica para el cuidado del oído, lo que pasa es que se debe de retirar el excedente, no precisamente todo, ya que de hacerlo el oído queda expuesto a la intemperie y las basuras y demás tipos de suciedad terminan por invadir la zona. Así que el uso de hisopos deberá de ser superficial y evitar ser introducidos en zonas que puedan dañar tejidos internos.

¿Como se debe limpiar el oído interno?

Sólo debe limpiarse si produce hipoacusia o si se necesita tener una visión completa del tímpano.

Para esta limpieza vas a necesitar:

  • Jeringuilla de oído
  • Agua a temperatura ambiente
  • Una toalla
  • Un recipiente para recoger el agua y la cera.

Pasos:

  • Alinea las curvaturas del conducto auditivo (estira del pabellón) para facilitar la entrada del agua y la salida de la cera.
  • Coloca el recipiente bajo la oreja y sobre el hombro, para recoger el agua.
  • Llena la jeringa con agua e introdúcela con cuidado en el oído, apuntando hacia arriba y atrás.
  • Controla la presión del agua para no dañar el oído interno.
  • Puedes repetir el procedimiento hasta tres veces (no más de 500 ml de agua) si el agua recogida no sale limpia.
  • Repite en el otro oído

¿Cómo puedes limpiar el oído externo?

El oído externo se compone por el lóbulo de la oreja y el borde de la abertura del canal auditivo. Esta zona de los oídos se puede limpiar sin ningún tipo de complicación.

Para esta limpieza vas a necesitar:

  • Un paño suave
  • Agua
  • Hisopos de algodón

Pasos:

  • Humedece el paño suave con agua tibia.
  • Retuerce el paño para asegurarte de que no tiene demasiada agua.
  • Limpia con cuidado el oído externo y detrás de las orejas.
  • El hisopo se debe usar sólo para limpiar los pliegues de las orejas, jamás se deben introducir en el canal auditivo, ya que podrías lastimarte o empujar la cera hacia el oído interno.