Es posible que toda tu vida lo hayas hecho mal si es que nunca alguien fue lo suficientemente específico para decirte cómo era la manera correcta de limpiar tus oídos.
De hecho, estamos seguros que gran parte de la población no lo hace de la manera correcta, ya que hasta hace poco fue que huno una gran cantidad de comentarios en redes sociales y en internet sobre esto.
Y es algo curioso porque uno pensaría que al tratarse de una actividad tan simple no debería de haber tanto problema.
Sin lugar a dudas, ahora que pensamos que el uso de los hisopos debería de ser un limpiador por completo es que nos enfrentamos a la noticia de que no necesariamente tienen que serlo.
Lo que pasa es que para el mejor cuidado de la salud y de la higiene, el hisopo no precisamente debería ser insertado en el oído, ya que podría llegar a dañar algunas partes internas del oído y eso sería bastante complicado y hasta doloroso. Además, ahora se sabe que la misma cera que se crea en los oídos no es tan mala como en algún momento nos llegaron a decir.
La cera es benéfica para el cuidado del oído, lo que pasa es que se debe de retirar el excedente, no precisamente todo, ya que de hacerlo el oído queda expuesto a la intemperie y las basuras y demás tipos de suciedad terminan por invadir la zona. Así que el uso de hisopos deberá de ser superficial y evitar ser introducidos en zonas que puedan dañar tejidos internos.
Esperamos que esto sirva para que puedas poner atención a la salud auditiva, ya que se trata de una que no siempre le prestamos atención, pero que en caso de no hacerlo podríamos acarrear diferentes situaciones nocivas, y vaya que no las necesitamos.