El día de hoy te compartiremos un truco para limpiar y desinfectar tu estufa sin tener que someterla a productos químicos.
Necesitarás:
- Papel de cocina.
- ½ vaso de bicarbonato de sodio.
- Agua oxigenada.
Cómo prepararlo:
En un recipiente, colocas el bicarbonato. Poco a poco se vacía el agua oxigenada en el recipiente. Mezclas hasta obtener una mezcla suave.
Cómo aplicarlo:
Debes aplicar esta pasta sobre las manchas que se quedan pegadas en las hornillas de la estufa. Dejas que actúe unos minutos y, con delicadeza, frotas la pasta con la ayuda del papel de cocina.
No dudes en repetir el proceso si observas que hay manchas difíciles de sacar.